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El tamaño de tu panza esta en tu cabeza


https://www.youtube.com/watch?v=e6nGkDtr7Xk

¿Has iniciado alguna vez en tu vida una dieta? ¿Has escuchado que alguien cercano a ti desee bajar de peso? Este es un tema muy recurrente en nuestros días, controlar el cerebro primitivo que nos impulsa a comer desenfrenadamente es todo un desafío.

Llega entonces ese día donde tomamos aire, y decimos entre dientes, “voy a comenzar la dieta” ponemos nuestro máximo empeño y empezamos a mejorar nuestra alimentación, haciendo algunos sacrificios, con dolor decimos que no a las provocaciones culinarias que deambulan por todas partes , pero muy pronto, cuando menos esperas, cuando crees que tu voluntad es firme, en un momento de debilidad tu cerebro atacará y te hará en cues

tión de segundos comer lo que no te comiste por semanas, buscará excusas para hacerte sentir que es solo un pecadito, que te lo mereces, que has avanzado , y entonces pierdes “toda” la voluntad, y desenfrenadamente, con más ansiedad que nunca comes como si nunca lo hubieras hecho y lo peor con un descaro que hace que te desconozcas, buscas mil excusas para sentirte bien, llegas a decirte: “es que yo soy el que mando, además me lo merezco”, y ahí terminó tu decisión, en el piso, más abajo que la vez anterior que lo intentaste.

Recibimos más de 50 mil impactos publicitarios al día, de camino a casa nos encontramos con innumerables cadenas de comidas rápidas, exhibiendo fotos provocativas en formatos de alta definición que hace que se nos vuelva agua la boca, si paras en un semáforo mira hacia los lados y fíjate que ahí está la tentación, están unos combos espectaculares a un magnífico precio, con mucha salsa, sugestionando tu inconsciente para que sin darte cuenta tomes un pequeño desvió y satisfagas tu necesidad.

Hoy te tengo una información que te puede ayudar a cumplir tu meta de bajar de peso, científicos de la Universidad de Exeter demostraron que basta con entrenar el cerebro durante 10 minutos al día para que puedas fortalecer tu voluntad, codificar tus circuitos neuronales para que opten por comida saludable, pero sobre todo para eliminar el mecanismo de recompensa que te pide a gritos dulces, bebidas azucaradas y comida chatarra.

Escogemos estos alimentos por que estimulan nuestro cerebro y permiten la liberación de dopamina y endorfinas, esto hace que las personas se sientas bien, experimenten placer y como consecuencia se vuelvan adictas a repetir esta acción una y otra vez.

Pero qué tal si jugamos a perder peso, que tal si te retas, así que vamos a divertirnos, de esta manera vamos a quitarnos presión y vamos a disfrutar el proceso, lo primero es comprarse una báscula, lo que no se mide no se puede controlar, de esta manera el juego será cuestión de números, cada día restar algunos dígitos, y en caso de subirlos no te desanimes, recuerda que cada día es una competencia con tu cerebro primitivo. También existen aplicaciones para tu celular como la creada por la doctora Natalia Lawrence que te ayuda a entrenar tu cerebro en el día para que aprenda a elegir la comida que más te conviene, realiza ejercicio, asesórate con un nutricionista, “El tamaño de tu panza depende de tu mente” éxitos es este nuevo desafío.


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